viernes, 26 de octubre de 2018

Andaina al Botánico de Montealegre


   Nos  encontramos  en Piñor por la mañana para ir a Montealegre,   salimos sobre las 10 y  fuimos en furgoneta hasta el auditorio. Una vez allí como nos había cogido el frío tomamos un café calentito en un bar cercano.
   Ya que estábamos cerca nos acercamos a conocer el "parque ferroviario dos carrileiros" que nos pareció muy curioso.







   La parte más costosa de la ruta ha sido la cuesta de "la Cruz Alta" para llegar al botánico, pero aún así la hicimos en poco tiempo.







   Una vez en el jardín botánico, la belleza de la naturaleza nos impactó, aunque en ese momento no se veía mucho porque había bastante niebla.




   Estando en el jardín botánico, nos situamos en el mapa y realizamos algunas de las rutas marcadas para conocerlo.


   Decidimos subir a la parte más alta del botánico, "Al mirador" y de camino nos encontramos con un invernadero que tenía una exposición de plantas carnívoras.







   Una vez en el alto, había mucha niebla y desde el mirador no se veía mucho; lo que allí nos encontramos fue un banco para ver las vistas de Ourense y una piedra muy grande que tenía una cruz en el alto.






   Descubrimos desde el mirador que había unas rocas con varias rutas para realizar la escalada.





   Seguimos por las rutas de senderismo, hasta llegar a unos huertos que se prestan a los ciudadanos de Ourense que quieren cultivar y no tienen terreno en la ciudad. Allí conocimos a un hombre que estaba preparando la tierra para plantar ajos.






   La niebla poco a poco se iba despejando y en nuestro camino nos encontramos unos bancos y sacamos nuestro almuerzo para recobrar energía.
Pudimos así saborear el "Bizcocho marmolado" que habían preparado nuestros compañeros la tarde anterior en el taller de cocina.






   Como se había ido la niebla volvimos a subir al mirador, para ahora sí poder disfrutar de las vistas de la ciudad con el sol, así las temperaturas subieron y estuvimos un rato más cómodos disfrutando del entorno.






   Desde el mirador estuvimos descifrando los edificios  y monumentos de Ourense, para descubrir donde se ubicaba cada uno.



   Cogimos ruta de nuevo con destino a la salida, parando antes en el auditorio del botánico, el cual vimos que podía ser un buen sitio para realizar conciertos.





   Ya nos estaba esperando la furgoneta y a las 13.45 ya estábamos de vuelta en Piñor.


   En general nos gustó y fue una experiencia muy bonita.


José Manuel y Nuria.




2 comentarios:

  1. Menuda joya en plena ciudad, merece la pena buscar una horita para hacer una visitilla por allí.

    ¡Desde luego las vistas son impresionantes!

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  2. vaia andaina molona! envexa de pasar un dia ao aire libre tan productivo

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