Los colores anaranjados y amarillos del bosque indican que el cambio de estación esta aconteciendo. Tímidamente, los castaños comienza a dejar caer los erizos de sus ramas, alimentando a animales y anunciando la fiesta del otoño que tan esperada es , el magosto.
Estos días, la cocina de Piñor se ha fundido en el blanco de la harina de trio, el azúcar, la levadura... y poco a poco ha cogido un calor acogedor de una típica cocina en funcionamiento cuando hace frío. El olor a canela y azúcar derretida comenzó a llenar los espacios vacíos y llenando las bocas de un "Hummmm" de placer.
Los dedos se impregnaron de grasa y migas de pan. Las bocas disfrutaron de los sabores de una fiesta otoñal que terminó con el deleite de un chocolate caliente y un trozo de bizcocho.
Ala, que pasada! Sempre traballando moitísimo para desfrutar dun momento xenial!
ResponderEliminarQue importante é o magosto na cidade de Ourense e menuda dedicación lle facedes sempre!
ResponderEliminarmoitas gracias estamos mellorando
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