Ya podemos decir que tenemos otra buena horneada de calabazas de peregrino.
Este año no son tan espectaculares como las del año pasado pero igualmente hay bastantes. Ahora toca esperar a que no se estropeen y que se sequen bien porque el proceso de conservación es bastante aleatorio y está fuera de nuestro control.
Lo cierto es que, para los que no lo sepáis, las calabazas son muy delicadas: cuando están en flor no se recomienda ni tan siquiera tocar las flores, durante la "maduración y crecimiento" de la fruta tampoco porque tienen más probabilidades de pudrirse y luego has que esperar a que se seque la planta y dejar que las calabazas vayan secándose también en un lugar seco pero ventilado.
El año pasado de 10 que recolectamos únicamente "prosperaron" 6.
Martín y Manuel C.
Eu creo que temos que abrir horizontes, para o ano temos que plantar outras castes de cabazas.
ResponderEliminarA ver as que conseguimos!!