Un
ciego hace su café por la mañana. Tiene de compañero de piso a un
pez. Pero, mientras prepara el café, va a buscar algo a un mueble donde se encuentra su compañero el pez y lo tira al suelo sin
querer.
Con
la pecera rota en el suelo, el hombre se desespera por encontrarlo.
Sin embargo, es el pez quien lo encuentra a él.
Por
fin juntos otra vez. Amor a los animales, como nuestras mascotas nos
quieren a nosotros.
Al
llenar el suelo de agua para que no se ahogue el pez, no le importa
empaparse, con tal de encontrar a su compañero.
Lo
más importante es estar juntos.
Sonia
Rodríguez.
Oh, que mensaje tan chulo.
ResponderEliminarMe gustó mucho en corto.